viernes, 7 de febrero de 2025

El tacón

 


Ese día de primavera

fue mi  puesta de largo

cuando el aire alzo mi falda

y tú quedaste prendado.

No por lo que viste,

si no por lo que imaginaste

más una dama

nunca enseña todas sus cartas.

Te miré descarada,

más tú desafiaste mi mirada

me bajé mi falda 

erguida, más acalorada

Sentí pasos tras de mí

y una voz que me hablaba

aceleré mis pasos 

de nada sirvió

tú seguías los míos.

Hasta que en aquella esquina

quebró mi destino.

El tacón del zapato 

se quedó tendido

más el pobre yacía muerto

Antes de tocar suelo 

tus brazos me sujetaron

tal fue tu fuerza 

que tus manos 

quedaron tatuadas 

en mis brazos.

Esa fue tu marca 

la que hoy sigue intacta.

Febril me sentí

tus ojos me poseyeron

y tu boca trémula 

me enamoro.

Me encienden tus palabras

cuando te oigo nombrarme

Diciéndome 

que por culpa del tacón

te encerré en mi cárcel.

No sería al revés, ¿preguntó yo?

Que tu voz me conquistó

que tu boca fue alidada

 de mí sin razón.

Más no importa 

como fuere 

ya paso el tiempo

y volvió ese viento.

Alzando mi camisón

esta vez en la cama

un te quiero de por medio

yo diciéndote, mejor es hacerlo

Campirela_